El gesto del imán no fue improvisado. Abdeslam Laarusi habló ayer de las virtudes de la mujer en el sermón que precede al rezo de los viernes. La mezquita de la calle doctor Pearson de Terrassa estaba a reventar como cada viernes. Incluso un poco más de lo habitual. "Hoy han venido algunos que nunca vienen a la mezquita", dijeron los más fieles a la cita. Ayer, había incluso presencia de la policía local en previsión de cualquier contratiempo. Laarusi, acusado por los Mossos d'Esquadra de haber llamado a la violencia contra las mujeres en sus discursos religiosos, alabó la figura femenina durante un oficio que algún miembro de la comunidad musulmana grababa en vídeo.
El imán entró en la mezquita en el último minuto mezclado entre otros fieles y tapado con la capucha de su chilaba. Siguió las indicaciones del habitual servicio de orden con que cuenta la mezquita. Se distinguen porque llevan un peto verde fosforescente. Controlan el flujo de personas y buscan huecos en la enorme planta de la mezquita para los recién llegados. Tras la discreta señal de uno de estos controladores, el imán aceleró el paso desde el interior del parque situado frente a la mezquita. El religioso escondía tras la sombra de la capucha unos intensos ojos claros.
Ya en el interior del recinto religioso, se dirigió directamente a la audiencia femenina, como si supiera que ese día especialmente hubiera de abordar cuestiones relacionadas con la mujer. La mezquita cuenta con un espacio reservado para ellas, ya que ambos sexos no pueden estar mezclados. Tienen una puerta propia. Más pequeña. Acceden a la mezquita por allí. Laarusi les dijo que tienen los mismos derechos que los hombres y también les recordó el deber que tienen de implicarse en aquellas comunidades de acogida adonde vayan y aprender el idioma local. Citó textualmente el castellano al referirse al resto de España y además el catalán si se residía en Catalunya.
A muchos no les extrañó el tono conciliador del imán. Dicen que siempre lo han encuadrado en un terreno moderado. "Yo vengo todos los viernes y jamás he oído que llame a la violencia contra las mujeres", dice un joven de origen marroquí en perfecto castellano. "Sólo nos explica lo que dice el Corán. La mujer tiene los mismos derechos que el hombre. Incluso en el libro sagrado está representada con la puerta del paraíso bajo sus pies. El imán nunca ha dicho nada ofensivo hacia la mujer ni lo hará. Lo que se ha dicho en contra de él no tiene ninguna lógica", señaló otro joven frente a la puerta de la mezquita.
Eran pocos los que rompían el silencio que parecía impuesto por consenso o desde la cúspide de alguna jerarquía invisible. Predominaban respuestas ambiguas dominadas por la frase "no sé, yo de eso no sé nada". Pero los menos vertebraban un discurso más claro. Un fiel aseguraba que no sabe si el imán ha dicho eso que le atribuyen, pero que si lo hubiera hecho, lo rechazaría. "No me gusta que nadie pegue a mi madre, ni a mi hermana, ni a mi hija y les aseguro que jamás he visto a mi padre pegar a mi madre", afirma rotundo. "Pero creo que eso es común a todos los seres humanos, en realidad", concluyó este hombre de origen marroquí de amplia sonrisa.
Nadie conoce el material de que disponen los Mossos, pero nadie quiere creer lo que se ha dicho. El presidente de la asociación musulmana de Terrassa, El Mustapha ben el Fassi, señaló en referencia a la diligencias abiertas contra el imán Laarusi que, "a la espera de que se aclare esta situación, la comunidad musulmana quiere dejar claro que siempre ha rechazado cualquier interpretación que dañe a la mujer, a la integración y a la convivencia".
Después leyó un comunicado redactado el 8 de marzo por la Unió de Comunitats Islàmiques de Catalunya que recuerda que "el islam no tolera a quienes tienden a perjudicar a la mujer o establecer discriminación entre hombres y mujeres", y, tras citar diversos versículos del Corán, destacó que en más de ochenta de ellos "se prohibieron los malos tratos y cualquier forma de violencia física y psíquica".
2 comentarios:
España recuerda a sus héroes como Don Pelayo, Rodrigo Díaz de Vivar "El Cid" y Torquemada, el azote de los marranos invasores. Os volveremos a expulsar de nuestra tierra como hicimos en el pasado, sucios invasores. La media luna será pisoteada, la espada del conquistador volverá a brillar.¡Santiago y cierra España!
En Manresa hay mezquita pequeña me podrias decir alrededor si hay una grande y bonita
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